Ingresos extras: ¡Nunca dependas de un solo ingreso!

Hoy en día, el mundo laboral y las formas de obtener ingresos son muy diferentes a lo que ocurría tiempo atrás. Seguramente conoces la historia de algún adulto mayor que ejerció el mismo trabajo durante toda su vida, con un salario suficiente para afrontar los gastos de su familia hasta que, finalmente, se retiró y se dio cuenta que no planificó su retiro; y les digo algo: los años de retiro son mucho más que los años laborables.

Sin embargo, esto cambió: la volatilidad económica y las crisis financieras de los últimos años aumentaron los riesgos de despidos, el quiebre de empresas y la necesidad de tomar deudas. Contar con un empleo fijo y bien pago ya no es sinónimo de seguridad económica, por lo que cabe preguntarnos: ¿a qué llamamos exactamente “ingresos extras” y por qué es conveniente contar con ellos? Pero, sobre todo, ¿cómo podemos generarlos? 

¿Has pensado qué te gusta hacer o cuál es tu Hobby?

Los ingresos extras son un monto complementario al dinero con el que ya cuentas de forma regular y estable, como un salario mensual en caso de que te encuentres bajo relación de dependencia con una empresa o por la retribución de un trabajo freelance.

Sin importar cuál sea el caso, el punto clave es comprender que una sola fuente de ingresos no es sinónimo de seguridad ante una situación financiera difícil de atravesar. Y a eso viene mi pregunta ¿Qué te gusta hacer? ¿Sabías que puedes crear un mini emprendimiento con esto? Por ejemplo, si te gusta hacer pasteles puedes crear un negocio online y empezar a venderlos desde allí.

Ingresos extras: sus 3 grandes beneficios 

Contar con ingresos extras brinda muchos beneficios, pero entre ellos, hay tres principales que debes conocer:  

• Minimizas el riesgo. La diversificación de las fuentes de ingresos te protege frente a los vaivenes en el contexto económico que pueden afectar tus finanzas personales.

   

• Mayor tranquilidad. El desempeño en tu trabajo y en tus nuevos emprendimientos son más fructíferos si no te sientes presionado y atemorizado por perder una única fuente de ingresos.

   

• Mayor flexibilidad. Puedes regular la intensidad de horas que le dedicas a la actividad de la que obtienes los ingresos extras según la carga de tu trabajo principal.

Sin ventas no hay paraíso

La palabra clave a la hora de generar ingresos extras es “venta”: el secreto está en detectar alguna necesidad y ofrecer una solución. Nota que hablo de solución y no de producto, porque cuando tu planteas muy bien el problema, y describes la solución, tienes el éxito asegurado. Como dice el famoso dicho “Hay 2 tipos de personas, el que llora y el que vende el pañuelo”

“Enamórate del problema no de la solución”

-Susette Sousa 

En ese sentido,  las redes sociales te proveen de canales prácticos para tal fin, ya que generan oportunidades ilimitadas y te permiten conectar con tu público objetivo con solo un post. Cuando empecé, tenía que tocar puerta por puerta, pero hora publicas y ya comunicas tu mensaje. Incluso, si puedes invertir en publicidad digital alcanzarás más personas de manera inmediata.  Todo esto te ayuda a comenzar a desarrollar tus ideas sin contar con un gran capital.

Ahora bien, ¿por dónde comenzar? Las oportunidades son amplias, solo se requiere de imaginación, visión y compromiso. Entre algunas ideas más comunes están:

• Enseñanza. Si cuentas con conocimientos sobre idiomas, manejo de software o materias escolares puedes brindar clases, cursos online o coaching sobre temáticas en las que eres experto.

   

• Asesoramiento. Puedes ofrecerte como asistente virtual para áreas en las que tengas conocimiento como finanzas, tecnología o marketing.

   

• Gastronomía. Si eres habilidoso en el arte culinario compartir recetas y armar tutoriales o vender productos comestibles, también es una salida interesante. Otra opción es si conoces a alguien que lo sea; en ese caso puedes ofrecerte a gestionar el negocio y obtener un porcentaje de las ganancias que se obtengan.  

      

• Mensajería y logística. Con la pandemia y las medidas de distanciamiento, proveer este tipo de servicios puede resultar muy redituable, sobre todo para los adultos mayores.

     

• Comercio. Todos tenemos objetos que ya no utilizamos como ropa, accesorios, muebles, libros o artefactos electrónicos. Implementar un garage de venta online o poner a disposición un sitio para que otras personas ofrezcan sus cosas a cambio de una comisión es una gran opción a considerar.

    

• Entretenimiento. Para los niños que pasan más horas en sus hogares puedes armar cajas con juegos y manualidades, ya sea para que utilicen en sus tiempos libres o para las celebraciones de cumpleaños. 

   

• Servicio inmobiliario. Si cuentas con una vivienda o habitación vacía puedes alquilarla a través de páginas como Airbnb o administrar el inmueble de alguien más que no tenga conocimiento para explotar esa oportunidad.

Como ves, no tienes excusas. No necesitas dinero para comenzar a producir ingresos: la apertura de cuentas en las redes sociales y la publicación de contenido pueden realizarse de forma gratuita. Solo tienes que explotar los conocimientos y habilidades con los que ya cuentas.

En definitiva, la clave está en impulsar tu creatividad preguntándote ¿Qué problemas tienen las personas hoy en día a las cuales pueda brindarles una solución? Las necesidades humanas son infinitas y muchas de sus soluciones están a la vista. ¡Lo que necesitas es tomar acción!